Wacom Inkling


Quiero dedicar el primer post del año a uno de los últimos "gadgets" de Wacom con el que he tenido la suerte de experimentar, para describirlo podríamos llamarle ¿bolígrafo digital? No, es mucho más.

Como admiradora y usuaria de los dispositivos que fabrica Wacom, recibí una gran satisfacción la primera vez que probé una tableta Intuos4 con los pinceles de Photoshop. Llevo siempre encima el lápiz Bamboo Stylus para iPad. Ahora los ingenieros de Wacom me han vuelto a sorprender con Inkling un nuevo dispositivo capaz de recoger los trazos sobre cualquier tipo de papel y transferirlos a un ordenador en cuestión de segundos.

Al abrir el elegante envoltorio que caracteriza a Wacom, te encuentras con un pequeño estuche que contiene un bolígrafo muy sofisticado, sus recargas, el cable para transferir los bocetos y un dispositivo de 7x3 cm que captura el movimiento y que se sujeta al papel a través de una pinza que lleva incorporada.



El dispositivo está diseñado para recoger bocetos, los ilustradores y diseñadores en muchos campos como el dibujo técnico, diseño de moda, diseño web, arquitectura, etc. encontrarán en esta herramienta una forma rápida de transferir sus ideas, dibujos y esquemas desde un origen analógico, bolígrafo y papel.

Vamos con las pruebas:
  • El primer impulso que tuve al tocar el papel con el bolígrafo Inkling fue empezar a escribir, a velocidad normal (yo escribo muy rápido), sin tener en cuenta la detección de movimiento, hasta el momento no había encontrado un dispositivo capaz de captar la escritura analógica a tiempo real, excepto un escáner claro, Inkling si, al transferir el texto al ordenador pude comprobar que no faltaba ni una coma ¡Increíble!
  • Luego dibujé un diagrama tipo árbol, como los que se utilizan para estructurar un sitio web, el resultado es excelente.
  • Toca el turno al dibujo, Inkling está diseñado para bocetos, no podemos exigir precisión al punto o a la línea, no obstante el resultado es más preciso de lo que esperaba. Por lo que he podido comprobar se obtienen mejores resultados manteniendo los trazos ágiles y próximos, sin embargo si dibujamos lentamente saltando de una zona a otra del papel, la unión de líneas puede sufrir una variación de alrededor 0,5mm según el estilo, la presión o la velocidad.
    En el vídeo a continuación se muestra el orden de la captura de movimiento de Inkling:
  • A la izquierda el dibujo en papel, a la derecha la transferencia de la imagen a Photoshop:
  • La resolución de exportación es muy alta cerca de 5000px, más que óptima.
  • La exportación a Illustrator es vectorial, aquí es donde he encontrado un punto débil para luego reutilizar contenidos, se trata de la forma en que interpreta las curvas, mejor dicho no hay curvas bézier, solo vértices, para reutilizar en Illustrator luego tendríamos que usar las herramientas de reducción de puntos y detección de huecos para optimizar, colorear y cerrar correctamente la ilustración.
  • Muestra de la interpretación del trazo en illustrator, una porción de un pétalo de la imagen superior:
  • La transferencia al ordenador se hace a través del programa Sketch Manager, el cual se instala nada más conectar el dispositivo de captura vía USB, desde dicho programa visualizamos los bocetos que hay en la memoria, los transferimos a nuestro ordenador, y además encontramos el botón PS y AI para transferir los dibujos en formato nativo a ambas aplicaciones.
  • Otro valor añadido es que el dispositivo nos permite añadir nuevas capas a medida que dibujamos y estas capas son interpretadas por Photoshop o Illustrator.
  • Por último una curiosidad, Sketch Manager también nos permite ver el vídeo de la secuencia del dibujo, el vídeo que muestro anteriormente está capturado durante la reproducción. Se me ocurre también varias formas de sacar partido a esta utilidad en animación.

En definitiva, Inkling es una excelente herramienta de diseño para captar para reproducir nuestras ideas al instante, de forma tradicional y sobre el papel.
Seguiré investigando y experimentando con este excelente gadget.